Los neumáticos son una de las piezas más importantes de cualquier vehículo, desde una bicicleta a un camión de gran tonelaje o un avión. Sin embargo, se habían quedado un tanto atrás en la incorporación de elementos de las nuevas tecnologías, algo que otras partes de coches y camiones han recibido ya de forma abundante y práctica. Sin embargo, empiezan a aparecer neumáticos inteligentes que son el resultado de la investigación, el desarrollo tecnológico y la innovación.
Marcas como Continental o Goodyear, dos de los grandes colosos del sector del caucho, han puesto en marcha proyectos para desarrollar y comercializar neumáticos inteligentes, capaces de conectarse a sistemas informáticos y aportar información en tiempo real sobre su estado de conservación y operatividad. Aprovechan que desde 2014 es obligatorio que todos los coches que se vendan en Europa lleven un sensor de inflado y presión de los neumáticos, con lo que se abre la puerta a difundir esta tecnología en todo el parque móvil.
De momento, aunque los resultados son diferentes, la forma de afrontar el problema es la misma en los distintos fabricantes que trabajan con esta idea: llenar el neumático de sensores. Los diferentes sensores registran continuamente muchos tipos de datos: nivel de desgaste, nivel de presión de la rueda, nivel de carga que soporta el neumático, equilibrio de la caja sobre los diferentes ejes, temperatura de trabajo, temperatura ambiente, estado del pavimento, etc. Esa red de sensores es lo que Continental llama, por ejemplo, Sensor-in-Tire, que es el nombre de este nuevo producto.
Los sensores constituyen también la base del denominado internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés), una nueva forma de comprender la red en la que los objetos, conectados a internet, ofrecen todo tipo de datos a través de una imparable proliferación de sensores. Esos datos se acumulan en cantidades ingentes. Una vez tratados y analizados permiten tomar decisiones más informadas y útiles en cualquier ámbito, desde la medicina a la gestión urbana, pasando por la sanidad o, para el escenario que nos ocupa, la movilidad.
En el caso de los neumáticos, esa información que van recogiendo los sensores se envía al ordenador del vehículo, que, tras procesarla, se la ofrece al conductor en forma de indicadores en su tablero de mandos. Pero, además, si el ordenador del coche se conecta través de la red con un centro de computación, se pueden agregar, comparar, analizar y visualizar los datos de miles y miles de vehículos que operan simultáneamente para llevar a cabo una optimización de la vida de los neumáticos.
Fuente: https://www.cerem.es/blog/neumaticos-inteligentes
Ahora que ya ha empezado el verano, es imprescindible revisar tu vehículo antes de salir de viaje de vacaciones para evitar posibles averías y problemas que estropeen tus planes. A continuación te explicamos qué aspectos son los que hay que revisar antes de ponernos en marcha:
- Aceite: Es importante revisar que el nivel de aceite se encuentra entre el mínimo y máximo establecido. Esta revisión hay que hacerla siempre con el motor en frío para que la comprobación sea buena y real.
- Anticongelante: Es imprescindible revisar el nivel de anticongelante. Si está bajo podemos provocar que el motor se caliente más de lo necesario, y puede acabar en una avería importante. Además, si nos quedamos sin este líquido podemos partir el motor, y estropear nuestras tan ansiadas vacaciones.
- Limpiaparabrisas: También hay que revisar el líquido del limpiaparabrisas, y las escobillas de los mismos para asegurarnos de que están en buen estado. Si todo está bien, podemos evitar algún accidente provocado por no ver bien la carretera por la suciedad o lluvia.
- Luces: Llevar los focos y las luces en buen estado y a la altura adecuada nos va a ayudar a aumentar la seguridad de nuestro vehículo y del resto de conductores durante el viaje.
- Líquido de frenos: si no lo revisamos puede ser un problema y llevarnos causar un accidente.
- Neumáticos: Hay que comprobar su estado, alineación, y presión. Todos los vehículos cuentan con unos indicadores sobre cuál es la presión adecuada para los neumáticos delanteros y traseros. También hay que evitar hacer un viaje con los neumáticos en mal estado: cortes, abolladuras, perforaciones, un desgaste irregular, etc. Ésto puede provocar una mala conducción del vehículo.
- Batería: hay que mantener limpios los bornes y cambiar la batería si alguno presenta un aspecto extraño (oxidado, rugoso…).
- Combustible: por supuesto hay que comprobar el nivel de combustible, para que luego no haya sustos si nos quedamos sin gasolina/gasoil y el coche nos deja tirados.