Consejos si viajas con niños

Siempre en su silla infantil: la normativa obliga a que los niños con una altura de hasta 1,35 metros viajen en coche con un sistema de retención infantil homologado para su peso y altura. Comprueba que la silla infantil está bien anclada al coche y que los arneses o el cinturón no quedan holgados o retorcidos. El RACE recomienda que los niños viajen en silla infantil o, al menos con cojín elevador, hasta que alcanzan la altura de 1,50 metros. Resuelve todas tus dudas sobre sillas infantiles aquí. Es recomendable que los niños viajen en el sentido contrario de la marcha. Más información sobre los grupos de sillas infantiles y sobre la marcha en el sentido contrario.

Comida ligera antes de iniciar el viaje y durante el trayecto. Comer mucha cantidad antes de cualquier viaje o tomar comida pesada, calórica y con grasas ralentiza la digestión y puede estropear cualquier viaje. No olvides llevar abundante agua para una buena hidratación, sobre todo en los trayectos en verano.

Ropa cómoda, transpirable y que dé libertad de movimientos. No olvides que el niño viaja en una silla infantil sujeto por el cinturón de seguridad o por los arneses, una situación incómoda para muchos de ellos. Hazle más cómodo el viaje con ropa de algodón, elástica y holgada.

Si el niño se marea en los viajes, te recomendamos que realices el viaje de madrugada para que vaya durmiendo la mayor parte del tiempo. También es recomendable utilizar el asiento central trasero para contemplar mejor el paisaje, evitar la visualización de películas o videojuegos, o utilizar pulseras antimareo.

Equipaje bien colocado en el maletero y nada de objetos sueltos dentro del habitáculo. Para una buena dinámica y estabilidad del vehículo es importante organizar el maletero correctamente. Igual de importante es no llevar objetos sueltos dentro del habitáculo, ya que en caso de colisión se convertirían en auténticos proyectiles. Guarda los juguetes y objetos para el niño en los compartimentos distribuidos en el interior del coche.

No te pongas hora de viaje. Prevé realizar más paradas para que los niños puedan estirar las piernas y refrescarse. La recomendación general es hacer descansos cada dos horas de viaje, aunque en el caso de los niños tendrás que hacer paradas con más frecuencia para ayudarles a realizar un viaje más cómodo y tranquilo. Antes de salir planifica el viaje y las posibles paradas.

No olvides coger alguno de sus juguetes favoritos ya que les ayudará a viajar entretenidos. También puedes organizar algún juego durante el viaje que les entretenga o cantar canciones. Otra manera de conseguir que el viaje les sea menos pesado es ponerles alguna película, aunque cuidado si son niños propensos a marearse.

Mucho cuidado con las distracciones que el niño puede causar en el conductor. Un estudio del RACE concluye que los bebés distraen al 79% de los conductores mientras que los niños menores de 14 años distraen al 68%.

Recuerda llevar a mano una muda con ropa de cambio, pañales o ropa de abrigo por si refresca, una toalla, toallitas refrescantes y un pequeño botiquín por si surge algún imprevisto.

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Importancia de revisar el coche antes de salir de viaje

Ahora que ya ha empezado el verano, es imprescindible revisar tu vehículo antes de salir de viaje de vacaciones para evitar posibles averías y problemas que estropeen tus planes. A continuación te explicamos qué aspectos son los que hay que revisar antes de ponernos en marcha:

  • Aceite: Es importante revisar que el nivel de aceite se encuentra entre el mínimo y máximo establecido. Esta revisión hay que hacerla siempre con el motor en frío para que la comprobación sea buena y real.
  • Anticongelante: Es imprescindible revisar el nivel de anticongelante. Si está bajo podemos provocar que el motor se caliente más de lo necesario, y puede acabar en una avería importante. Además, si nos quedamos sin este líquido podemos partir el motor, y estropear nuestras tan ansiadas vacaciones.
  • Limpiaparabrisas: También hay que revisar el líquido del limpiaparabrisas, y las escobillas de los mismos para asegurarnos de que están en buen estado. Si todo está bien, podemos evitar algún accidente provocado por no ver bien la carretera por la suciedad o lluvia.
  • Luces: Llevar los focos y las luces en buen estado y a la altura adecuada nos va a ayudar a aumentar la seguridad de nuestro vehículo y del resto de conductores durante el viaje.
  • Líquido de frenos: si no lo revisamos puede ser un problema y llevarnos causar un accidente.
  • Neumáticos: Hay que comprobar su estado, alineación, y presión. Todos los vehículos cuentan con unos indicadores sobre cuál es la presión adecuada para los neumáticos delanteros y traseros. También hay que evitar hacer un viaje con los neumáticos en mal estado: cortes, abolladuras, perforaciones, un desgaste irregular, etc. Ésto puede provocar una mala conducción del vehículo.
  • Batería: hay que mantener limpios los bornes y cambiar la batería si alguno presenta un aspecto extraño (oxidado, rugoso…).
  • Combustible: por supuesto hay que comprobar el nivel de combustible, para que luego no haya sustos si nos quedamos sin gasolina/gasoil y el coche nos deja tirados.